Prefiero usar el término de Bienestar que el de Felicidad. Creo que vivimos unos momentos en que “debemos” ser felices, es una exigencia que incluso hace que personas se pongan máscaras con una sonrisa para no desentonar con los demás.
Considero que nunca se llega a lograr esa Felicidad que tanto se habla, porque no es un fin, sino un camino que recorres en tu día a día. No es un final del camino sino el carruaje que te transporta cada día.
Es por ello, que prefiero hablar de Bienestar, que sea un estado general. Las personas que logran ese Bienestar, son aquellas que tienen sensación de plenitud.
Son personas, que también tienen problemas pero los maneja de una forma resolutiva.
Te invito a reflexionar sobre cuáles son las claves para lograrlo:
Capacidad de cambiar de actitud: La actitud es esencial para ver el mundo. Un situación se vive de una manera u otra dependiendo de cómo la observes, y esto es actitud. Y esto, depende totalmente de ti.
Vivir las pequeñas cosas de tu día a día: Disfrutar de todo lo que haces, busca pequeñas sensaciones, siéntelas, son las que realmente cargan tu pilas. Y en ese momento no pienses en otra cosa: oler un libro, que te dé el sol en la cara, una taza de té mirando a través de la ventana cuando llueve, andar por la arena, etc
Sintoniza tus valores: Si lo que estás haciendo hoy va acorde con tus valores. Si no es así, no vas a sentirte bien contigo mism@. Aprende a identificar tus valores (léase)
Pensar, Sentir y Hacer en la misma dirección: Si no es así, vas a sentirte mal. Por ejemplo, capacidad de decir no de forma asertiva (léase). Si aceptas hacer algo que realmente no quieres hacer pero te “sabe mal”, la consecuencia es que serás tú el que no se sienta bien después consigo mismo.
¿Qué añadirías tú?