Sentirse como un satélite que le da vueltas a un planeta, atrapad@ sin saberlo, con una inmensa fuerza que te arrastra hacia el centro, que arrasa con todo y con todos, que deja atrás aquello que realmente amas y que te hacía sentir tan bien, sin entenderlo vas hacia ello, como si estuvieras hechizad@, como si estuvieras sin estar…. Quiero que sepas que esto no es lo que se siente cuando es amor, es Dependencia Emocional.
La Dependencia Emocional es la necesidad de estar con la otra persona a pesar de saber que es tóxica para mí. Tóxica no significa que la persona es tóxica, sino que juntos, hace que tú no crezcas, que tú no seas tú, que hayas perdido tu esencia.
La Dependencia Emocional funciona como una adicción al amor, a esa persona. Siento que el eje de mi felicidad es la otra persona, que cada vez necesitas más, que, si no sabes o se reduce hacia ti, tienes ansiedad, pero cuando te dan migajas de amor, alivia tu malestar… ¿Te suena? Es una descripción básica de cualquier adicción.
Además, engancha como la ludopatía, por refuerzo intermitente, a veces toca y a veces no. En un momento dado te ha dado algo que quieres que repita, a veces te lo da, y a veces no, y esto te engancha muchísimo.
Si sientes que has perdido tu esencia, no es amor sano, si sientes que, en la balanza, hay más sufrimiento, no es amor sano.
Comments