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¿Qué consecuencias psicológicas puede tener esto en las víctimas?
Todos y todas estamos consternad@s. El pasado jueves, día 22 de febrero, nos acostamos con el corazón encogido debido a las imágenes que se estaban emitiendo por la televisión, estaba ocurriendo un incendio en la ciudad de Valencia, concretamente Campanar.
Al levantarnos, las noticias nos comunicaban lo peor, existían víctimas mortales y algunas de ellas estaban en peligro. A ello, le sumamos la cantidad de mascotas que no han podido salir de los pisos en los que se encontraban y que, por desgracia, no pudieron salvar.
La ayuda psicológica es crucial, especialmente en las primeras horas para ayudar a las personas en la respuesta y recuperación del desastre que está sucediendo en sus vidas. Los profesionales de la salud mental especializados en emergencias e intervención en crisis proporcionan un apoyo psicológico inmediato a las víctimas que están en estado de shock brindando un espacio seguro para que expresen sus emociones, miedos y preocupaciones inmediatas. De esta manera se reducen las crisis emocionales agudas como suicidio, ataques de pánico o comportamientos autodestructivos.
¿Qué consecuencias psicológicas puede tener esto en las víctimas?
Trauma y Estrés Agudo: El evento mismo del incendio puede provocar trauma y estrés agudo en los afectados, especialmente si están presentes durante el incendio o si pierden seres queridos, mascotas o posesiones importantes.
Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT): Para algunas personas, la experiencia de un incendio puede desencadenar síntomas persistentes de TEPT, como flashbacks, pesadillas, evitación de situaciones relacionadas con el incendio, hipervigilancia y cambios en el estado de ánimo.
De la misma manera, personas que están viendo el incendio aunque no les afecte directamente a ell@s, pueden desencadenar trastorno de estrés postraumático.
Ansiedad y Depresión: Después de un incendio, es común que las personas experimenten altos niveles de ansiedad y depresión. Pueden sentirse abrumadas por la incertidumbre sobre el futuro, la pérdida de seguridad y estabilidad, y el proceso de recuperación.
Duelo y Pérdida: Los afectados por un incendio pueden experimentar un profundo sentido de pérdida, ya sea por la pérdida de su hogar, pertenencias queridas, recuerdos familiares o incluso vidas humanas. Este proceso de duelo puede ser complicado y prolongado.
Impacto en la Autoestima y la Identidad: La pérdida de posesiones materiales y la alteración de la vida cotidiana debido a un incendio pueden afectar la autoestima y la identidad de los afectados. Pueden sentirse menos seguros, menos capaces o incluso culpables por lo que sucedió.
Dificultades en las Relaciones Interpersonales: Las relaciones familiares, de pareja y sociales pueden verse afectadas por las consecuencias emocionales y prácticas de un incendio. La tensión, la frustración y la incomodidad pueden surgir a medida que las personas luchan por adaptarse a las circunstancias cambiantes.
Problemas de Salud Física: Además de los efectos psicológicos, un incendio también puede provocar problemas de salud física, como lesiones por quemaduras, dificultades respiratorias debido al humo o productos químicos inhalados, y otras afecciones médicas relacionadas con el estrés y la exposición a condiciones adversas.
Recuerda que es normal experimentar una amplia gama de emociones después de un evento traumático como un incendio en tu casa. Si encuentras difícil manejar tus emociones o si sientes que el trauma está interfiriendo significativamente con tu capacidad para funcionar en la vida diaria, considera buscar ayuda de un profesional de la salud mental, que pueda ayudarte a procesar el trauma y desarrollar estrategias de afrontamiento saludables que te guíe rumbo hacía tu bienestar.