Estos días las noticias y las redes sociales se han llenado de tristeza y escándalo por la historia de Drayke Hardman. Esta trágica noticia nos recuerda que el suicidio existe y que el suicido infantil también. Que nuestros peques sienten, sufren y en muchas ocasiones pasa totalmente desapercibido.
Son muchos los peques y adolescentes que acuden a consulta y que cuando les conoces bien, les oyes y rascas para saber más, acaban saliendo situaciones muy complicadas con su grupo de iguales. En algunos casos, sobre todo de adolescentes, incluso historias y situaciones traumáticas que han sido el punto de inicio de muchas inseguridades personales, complejos y creencias hacia uno mismo. Historias donde aparecen el no poder mirarse al espejo, no valorarse, creer que no merecen nada e incluso las autolesiones para al menos así sentir algo o como manera de castigarse por no ser lo que “deberían de ser” …
¿Por qué lo haces? No sé… es lo que creo que merezco…
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