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¡Año nuevo, vida nueva! ¿Es el inicio del año un buen momento para dejar de fumar? Con el cambio de año se hacen una serie de propósitos en los que muchas veces se encuentra el de dejar de fumar. Lo cierto es que algunas personas se plantean una serie de propósitos nuevos, sin embargo, empezar muchos hábitos nuevos a la vez no es un buen indicador de éxito. Cuando se inicia un nuevo hábito se necesita emplear mucha energía para lograrlo. Por ello, es mejor ir de uno en uno. Primero hay que instaurar un nuevo hábito y cuando ya esté instaurado, se podría pasar a iniciar el siguiente y así, sucesivamente. De otra manera e iniciando todos a la vez, lo que acabará ocurriendo es será que utilicemos mucha energía en llevar a cabo todos los hábitos a la vez y acabemos desistiendo. En el caso del tabaco, los datos muestran que los fumadores necesitan una media de 5 intentos para dejar de fumar.
Entonces… ¿En qué momento del año es mejor dejar de fumar?
Según estudios realizados con tabaco, se estima que entre septiembre y diciembre son las fechas en las que más personas dejan de fumar verdaderamente.
Realmente en septiembre es otro momento en el que en cierto modo empieza el año ya que termina el verano, se abren los colegios, hay cambio de estación.
Además, muchas personas se preguntan si es mejor dejar de fumar de forma gradual o de golpe. Aunque depende de cada persona, existen algunos tratamientos que optan por dejar de fumar de golpe, mientras que otros tratan de reducir el consumo de tabaco e ir trabajando en el manejo de situaciones.
Por otro lado… algunos se preguntan si hay un momento idóneo para dejar de fumar. Mientras que lo cierto es que cada persona tiene su momento y toma la decisión en el momento que considera. Existe el llamado método del avestruz, en el que la persona toma la decisión de dejar de fumar cuando le ha ocurrido algo grave que le obliga en cierto modo a dejarlo.
Para dejar de fumar, tan sólo hay que hacer un sencillo gesto: ¡Fumar el último cigarrillo!
Recomendaciones para dejar de fumar
Algunas de las recomendaciones que se hacen cuando se toma la decisión de dejar de fumar son las siguientes:
Decisión firme. Es necesario que la decisión sea inamovible, es decir, hay que buscar argumentos que sean lo suficientemente fuertes como para tener clara la decisión de dejar de fumar. Si no se está convencido, se volverá a caer rápidamente. Hay que buscar pilares fuertes que sustentes la decisión.
Organización. Es necesario poner una fecha a partir de la cual se dejará de hacer esa conducta. En algunas ocasiones ayuda marcar una fecha significativa, como el día del aniversario.
Presente. Dejar que los días vayan pasando y decirse a uno mismo hoy no he fumado, mañana no lo sé. De lo contrario si tenemos pensamientos del tipo no voy a fumar para siempre, generará un malestar y agobio.
Apoyo. Buscar en el entorno aliados que ayuden a que el viaje sea más agradable, mediante una actitud de respeto hacia la decisión tomada.
Conductas saludables. Se trata de evitar momentos, situaciones o personas con las que se fumaba y buscar otros entornos que sean más saludables y libres de humo. Como por ejemplo, practicar algún deporte, comer de forma saludable… son conductas que alejarían de querer fumar.
Medicación. En algunas ocasiones es necesario tomar mediación para calmar la ansiedad que conlleva el dejar de fumar para superar el síndrome de abstinencia.
Prevención de recaídas. Es necesario volverse un experto en uno mismo para conocer en qué momento se puede volver a fumar y tratar de anticiparse para evitarlo. Algunos motivos de recaída son: sufrir estrés, recibir una noticia inesperada, depresión, aumento de peso, estar con otros fumadores…