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Desde mi punto de vista profesional creo que hacía falta que acuñaran este fenómeno que últimamente veo que padecen muchos de mis pacientes. Seguro que conocéis a alguien que va de pareja en pareja, el intervalo entre las relaciones apenas existen, suelen tener relaciones tóxicas. Estas personas no conciben su vida sin alguien a su lado. ¿Os suena?
La Anuptafobia es el miedo irracional e injustificado a quedarse solteros para siempre, a no encontrar pareja, más allá si hay o no un deseo de casarse, quedarse soltero para siempre. Son adictos al amor. Esta fobia está regulada por la herencia cultural y el entorno social, además de la educación que nos han dado y el crecimiento personal de cada uno.
La sociedad nos inculca que para tener éxito en la vida debemos tener un buen trabajo y formar una familia. Si esto no sucede, es catastrófico. Tenemos una presión social brutal que empieza a los 30. ¿Qué sucede si cumples treinta y no tienes pareja? ¿Qué te dice la gente de alrededor? Tus amigos se casan, se independizan, tienen niños, etc. ¿Y tú qué? PUES NADA. La felicidad no depende de una persona a tu lado sino depende de uno mismo, y esto es precisamente la creencia que debemos cambiar.
Está claro que a las personas nos gustaría compartir la vida con alguien, pero no debemos confundir deseo con necesidad.
Estas personas que padecen anuptafobia, hacen una valoración negativa de sus vidas, hacen atención selectiva fijándose sólo en su trayectoria amorosa. Y perciben que si no han formado una pareja estable han fracasado y ya no van a conseguirlo. Es como si hubieran perdido el tren.
Son personas que llega a ser obsesión encontrar pareja. Cuando se casa algún amigo se deprimen, porque aparecen pensamientos erróneos tipo “Yo nunca voy a encontrar a alguien que me ame de esa manera”.
Referente al género, tanto hombres como mujeres lo sufren. La diferencia está en cómo lo percibe la sociedad. Un hombre que no se ha casado es hombre “no cazado”, y se le atribuye más a nivel profesional.
En cuanto a la soledad, no es tolerada, no soportan estar solos, puede ser asfixiante. No están a gusto consigo mismo y necesitan de alguien para reforzarles y apoyarles.
Para que una relación funcione la persona debe amarse, aumentar su autoestima. Es la única manera que puede funcionar la pareja. Tu pareja no tiene la llave de tu felicidad.
Creo solemnemente que las mujeres que hemos crecido con las princesas Disney teníamos la creencia irracional de que un príncipe azul nos rescataría de la malvada. Hemos crecido con esta idea del amor. Y es una vocecita inconsciente que llevamos dentro de nosotras.
Empieza a aparecer la anuptafobia cuando pasamos de una vivencia espontánea del amor a hacer un plan de acción lo más estudiado posible para conseguir pareja.
Podríamos numerar algunos síntomas: cuando va a un sitio nueva busca automáticamente posibles candidatos para ser su pareja, observar con detalle parejas de su alrededor y pensar en cómo han llegado ahí, preguntas recurrentes de porqué ellos no…
La anuptafobia puede venir dada con una segunda forma: miedo a estar casado con la persona equivocada. Son personas que obtienen un cierto grado de compromiso per siempre están buscando al príncipe perfecto. Esto se transforma en la búsqueda permanente del amor de su vida.
No debemos confundir que la condición humana hace que seamos animales de compañía. Si aparece este temor y no abruma el sentido común está dentro de la normalidad.
La anuptafobia puede ser tratada mediante la terapia cognitivo-comportamental, uno de los objetivos es cambiar la creencia irracional de que la vida soltera no es un castigo o un mal.
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